Guardar un bolso de lujo correctamente es fundamental para mantener su valor, apariencia y durabilidad. Estos bolsos no solo representan una inversión financiera, sino también una pieza de moda que muchas veces lleva un legado histórico y artesanal.

Aquí te doy unos tips de cómo guardar tus bolsos:
1. Almacenamiento en su funda protectora

Los bolsos de lujo suelen venir con una funda de tela o bolsa de polvo diseñada específicamente para protegerlos de la exposición al polvo y la luz. Estas fundas ayudan a evitar ralladuras y decoloración, especialmente si el bolso está hecho de materiales delicados como cuero o gamuza. Además, las fundas permiten que el bolso “respire,” evitando la acumulación de humedad dentro de la bolsa, lo cual es especialmente importante en climas húmedos.

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2. Relleno adecuado

Para que el bolso mantenga su forma, es ideal rellenarlo con materiales suaves, como un cojín para ayudar a mantener su estructura, te recomiendo los cojines de la marca Siddhi Sac, hay cojines de todos los colores y estampados, además puedes personalizarlo a tu estilo.


3. Evitar la exposición a la luz directa y al calor

Los materiales de lujo como el cuero y la gamuza pueden decolorarse o resecarse con el tiempo si están expuestos a la luz solar directa o al calor. Lo ideal es almacenar el bolso en un armario o espacio donde no le llegue la luz directa. Si lo almacenas en una repisa abierta, asegúrate de que esté lejos de ventanas o fuentes de luz intensa. Además, la exposición al calor puede causar que ciertos materiales se agrieten o se vuelvan quebradizos.

4. Posición vertical y sin aplastamiento

Colocar los bolsos de pie ayuda a mantener su estructura. Evita apilar unos encima de otros, especialmente si son de cuero o tienen una forma específica, ya que podrían deformarse. Una opción es usar divisores en los estantes o invertir en organizadores específicos para bolsos que los mantengan separados y erguidos.

5. Deshumidificadores en el espacio de almacenamiento

En lugares húmedos, la humedad puede dañar los materiales, causando manchas de moho o deterioro. Colocar deshumidificadores o bolsitas de gel de sílice en el armario donde guardas los bolsos puede ayudar a controlar el nivel de humedad. Esto es particularmente importante para los bolsos de gamuza y cuero, ya que son más susceptibles a la acumulación de moho.
6. Rotación regular de los bolsos

Aunque no uses un bolso frecuentemente, es buena idea sacarlo de vez en cuando para airearlo y evitar que acumule polvo. Si rotas tus bolsos, puedes inspeccionarlos para verificar que están en buen estado y no se están deformando en su almacenamiento prolongado.
7. Cuidado de las cadenas y herrajes

Si el bolso tiene cadenas o herrajes de metal, estos pueden rayar la superficie del bolso o hacer marcas en otros materiales. Para evitarlo, envuelve estos herrajes con papel de seda o una tela suave antes de almacenar el bolso. Esto es especialmente útil para bolsos con cadenas largas que podrían presionar el material del bolso cuando se guardan.

8. Mantenimiento y limpieza antes de almacenar

Antes de guardar un bolso durante mucho tiempo, asegúrate de limpiarlo siguiendo las instrucciones de cada material. Retira restos de suciedad, polvo o cualquier residuo en el forro, ya que estos pueden causar olores desagradables o incluso manchar el bolso con el tiempo. Además, deja que se airee antes de guardarlo para asegurarte de que no tenga humedad que pueda generar malos olores o deteriorar el material.

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